Si la almohada cuña no se adecúa a nuestras necesidades no solamente puede influir en la calidad de nuestro sueño, así mismo puede conllevar distintos problemas de espalda. Puesto que pasamos una gran cantidad de horas de nuestra vida en la cama, nos conviene tomarnos el tiempo que fuera necesario con el objetivo de escoger la almohada perfecta.
Con el objetivo de tener la cabeza en armonía con tu columna, es mejor no usar una almohada. Sin embargo si no puedes estar sin una, te recomiendo que uses una almohada cuña realmente plana alrededor de los 5,4 cm de grosor. Las almohadas hechas de plumón son principalmente las más demandadas.
Elige una almohada firme que te facilite un fantástico soporte para la cabeza. Aunque no te inclines una almohada demasiado resistente, en vista de que puede proporcionarte dolores de cabeza..
Con el propósito de permitir la alineación de la cabeza, el cuello y la columna vertebral, te aconsejamos las almohadas gruesas y blandas, desde 8 cms.
El plumón es bien conocido por su escaso peso y su condición de carga. Si lo que quieres es una almohada ligera y suave, mejor una con relleno de plumón. En cambio si necesitas una almohada cuña sólida, escoje el un relleno de plumas.
Una almohada con esta clase de relleno sintético es la de espuma que cuenta con la cualidad de restablecer su forma anterior cada vez que nos movemos. Se amolda de manera correcta a nuestra silueta. Este relleno sintético se aconseja para gente con padecimientos de espalda. De igual manera, no es conveniente para todas aquellas personas transpiran verdaderamente mucho.
Una almohada de látex entrega un buen apoyo, una considerable flexibilidad y una increíble circulación del aire dada su esqueleto en forma de panal.
La mayoría de de las almohadas se catalogan en en una de estas 3 categorías: almohada cuadrada 66×66 cms, almohada rectangular 47×70 cms y la ergonómica 41×71 cms. Generalmente las fundas de almohada están disponibles en una considerable cantidad de medidas.
El espesor es un dato primordial para escoger una almohada cuña. Define su apoyo y bienestar:
Aquellas personas de más de noventa y cinco kilogramos ejercen algo más de presión en el colchón. Este incremento presión contrae el espacio entre la cabeza y nuestro colchón. Debido a lo cual, una almohada más estrecha es bastante más indicada. Aquellas personas más de entre 63 y 75 kg no proporcionan tanta presión, así que, precisarán almohadas realmente más gruesas con el objetivo de completar el espacio entre la cabeza y nuestro colchón.
Virtudes:
Se puede mejorar:
Ventajas:
Contras:
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